Un cordobés que desde su lugar de residencia actual, la ciudad entrerriana de Villa Elisa, está decidido a construir un sueño más que importante para los amantes del Rock.
Con esa sangre "kissera" que le corre por las venas, Javi nos regala hoy una buena e informativa charla, digna para todo aquel que quiera ingresar o seguir disfrutando de los diversos caminos de la música.
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-¿Te consideras uno de los principales coleccionistas de Kiss en el país?
-Me considero un “kissero” más, de los muchos que hay en la Argentina. Acá hay muy buenos coleccionistas de la banda. Gente que da y deja mucho por Kiss. Por todo su merchandising y locura.
-Te pregunto esto porque “MY WAX” o “La Biblia del LP de Kiss”, es un libro que contiene la búsqueda exhaustiva del catálogo en vinilo de la banda alrededor del mundo. ¿Cómo crees que llego tu nombre ahí?
-La verdad es que yo me enteré hace poco que mi nombre está en esos libros.
No lo sé. Seguramente por Facebook o alguna red llegó. Pero no estaba enterado de esto.
Lo que si sabía, es que mi nombre está en el Tour Book de la gira “End Of The Road” porque me contactó una persona directamente relacionada con Gene Simmons que estaba pidiendo que elija a coleccionistas latinos.
Le encomendaron que eligiera a Kiko Riojas que es un coleccionista muy importante en México. Él me eligió a mí y a otro chico brasilero que no recuerdo el nombre ahora, y en los créditos de agradecimiento sale mi nombre justo al lado del de Tom Five, guitarrista de Rock Zombie (o White Zombie) que es una banda que también me gusta mucho. Y bueno, está la entrada de Kiss en Argentina que yo mandé y alguna cosita más sale en ese Tour Book.
Debe ser por eso. Porque yo no sabía que estaba incluido en esos libros.
-Para llegar a todo esto que me contás, antes hubo un largo camino. ¿Cómo conociste a Kiss?
-No sé si hubo un gran camino antes. Yo escucho Kiss desde los trece, catorce años. Obviamente que todo empezó por el llamado de atención de verlos pintados. Esa especie de héroes de comics que a la vez hacían música.
Con los años fue conformándose una pasión muy importante. Acá los conocí por mi hermano más grande. No sé de donde salió un Casette sin tapa de Kiss desenmascarados y otro de Queen. Yo me quede con el Casette de Kiss el siguió escuchando Queen.
-Si hablamos del surgimiento de la colección. ¿Te decidiste a comenzar la recolección de ejemplares o heredaste cierta base de otro lado y seguiste sumando cosas?
-No. Me decidí yo solo a coleccionar. El fanatismo fue incrementándose de a poco. La verdad es que no heredé nada. Cada ejemplar que tengo de Kiss es algo que fui buscando, que traje de algún país o que me regalaron. Pero digamos que la colección empezó de cero conmigo.
-Cerrando con el tema Kiss. ¿Cuántos vinilos de la banda hay aproximadamente? ¿Y cuál es tu ejemplar más valioso?
-Vinilos de Kiss, si más no recuerdo, hay veinte de estudio y seis en vivo. Después hay un montón de ediciones que salieron en distintas partes del mundo entre oficiales, de Japón, EE. UU. e Inglaterra que no han salido acá. Y de mi colección debo tener 2000, 2500 discos entre oficiales de distintos países, no oficiales, simples.
Lo que sí tengo son colecciones completas como la colección argentina, la colección en simples de Argentina, la colección americana. Tengo muchos vinilos de época cerrados.
Y el ejemplar más valioso, en realidad son varios. La discografía argentina es muy buscada y valiosa. Quizá eso hace valioso a lo que yo tengo. Y después hay unos box japoneses que también son muy limitados. Yo tengo dos. Pero creo que lo más valioso es lo argentino, los vinilos argentinos. Y el más buscado de Kiss que es una recopilación, la tengo firmada por dos de ellos. Por Gene Simmons y Ace Frehley.
-¿Qué otras bandas pisan fuerte en esos estantes?
-Iron Maiden, Metallica, Bon Jovi, Whitesnake, Beatles. Son los que pisan fuerte acá también. Twisted Sister, hay varios. Pero sobretodo Iron Maiden.
-¿Parte de esta colección tendrá su lugar de destino en el futuro, no?
-El futuro de la colección es un lugar más amplio y cómodo. Más apreciable. Para que se pueda ver, visitar y compartir.
-¿Qué es la “Feria Argentina de Vinilos”?
-La “Feria Argentina de Vinilos” nace a raíz de que a mí, y a un par de amigos, nos echaron de un grupo de Facebook que tenía muchos adeptos. Esto pasó porque no compartían la forma cristalina con la que manejábamos nuestras operaciones. Con lo que se compraba y se vendía.
Es un grupo que hoy en día no sé cuántos miembros serán, pero tiene a tres administradores que son totalmente corruptos. Gente que tenía a disposición todo lo que se ponía en venta y podían comprarlo ellos primero. Entonces, a raíz de unos problemas y destapes de olla que hubo de parte nuestra, nos echaron.
Y bueno, en definitiva nos terminaron haciendo un favor porque creamos la Feria Argentina de Vinilos. Un grupo que cuenta con miembros que son muy buena gente, y sobretodo, transparentes. Una comunidad donde se incluyó a muchos contactos que conocíamos anteriormente y que también habían sido expulsados del otro grupo por ciertos motivos.
Finalmente pudimos formar una linda comunidad en donde la gente vende, compra, expone, consulta y puede ser asesorada, ya sea por un disco o una bandeja.
La realidad es que también fuimos más allá de lo que es el vinilo y de todos los otros formatos que existen, desde los más nuevos hasta los más viejos, pasando por cintas abiertas, DAD, DCC (Digital Compact Casette). Por un montón de formatos que obviamente ya no existen, pero que han quedado registrados en algunos discos y bandas.
Dentro de este grupo tenemos a mucha gente conocida por nosotros, y también por el público mismo, como Eduardo de la Puente y Carla Ritrovatto. También gente de Vox Dei y TN, que participa y hace que esto siga creciendo muchísimo.
En seis meses ya somos casi 6000 miembros, y eso que se echa a un promedio de 20 personas por día por irrespetuosos y no cumplir ciertas normas que pusimos. Pero queremos calidad y no cantidad. No admitimos malas palabras, tampoco cuestiones de precios. Cada uno pone el precio que cree que debe ganar de un disco. Por ahí es mucho, por ahí es poco, pero no cuestionamos eso. Cuestionamos el insulto y la falta de respeto, directamente tenemos tolerancia cero en eso.
Ahora nos está sobrepasando porque tenemos un ingreso de 100 personas por día. Pero gracias a eso somos nombrados en distintos medios. La verdad es que la Feria Argentina de Vinilos es hermosa. Tenemos curadores, especialistas en cada estilo de música. Está Pepe Castro que es un ex colaborador de la revista Pelo, mucha gente que colabora con diferentes estilos y hace que estemos muy contentos porque la verdad es que nos sorprendió tener a tanta gente en muy poco tiempo. Hay personas que viven de la venta de vinilo y encontró en nosotros un buen nicho para su venta. También hay canjes, consultas, muchas cosas en dónde se puede estar muy cómodo.
-En Estados Unidos, la venta de vinilos superó a la de CDS por primera vez en treinta años. ¿Cómo ves este fenómeno actual del vinilo, que parece estar llegando a la Argentina, teniendo en cuenta que muchas veces los pronósticos tecnológicos parecen llevarse todo por delante con sus avances?
-Es algo sencillo. La venta de CDS me parece que viene en caída hace mucho tiempo y desde hace cuatro o cinco años la venta de vinilos se reivindicó por un montón de cosas. Todas las bandas están editando de nuevo en vinilo, llegando a hacer hasta cuatro versiones del mismo. Pero en fin, no era muy difícil que esto pase. Igualmente en algunos lados del mundo se siguieron haciendo los vinilos. Acá se dejaron de hacer a principios de los noventa, pero también en muchos otros lados esto siguió, en menor escala pero haciendo al fin. Ahí es cuando conseguía y compraba vinilos en algunas discotecas que cerraban y eso me fue permitiendo crear y hacer crecer a una buena parte de mi colección.
Y acá en Argentina el fenómeno del vinilo llegó de vuelta hace rato. Lo que pasa es que tenemos un país complicado económicamente. Un buen vinilo en cualquier lugar del mundo vale 15 o 20 dólares, lo que acá lo transforma un vinilo caro. Es casi un cuarto del sueldo de alguien. Gastar eso se hace muy difícil para un sueldo promedio de cualquier argentino, pero es la mejor manera de reivindicar la música y escucharla como debe ser escuchada, a través del vinilo, y eliminar todo lo digital. Los que escuchamos o coleccionamos creo que siempre lo hicimos así.
Ahora mucha gente está desempolvando nuevamente los vinilos de sus viejos, de los primos y abuelos. De alguien que nunca más le dio importancia. Está buenísimo lo que está pasando.
-Vamos acercándonos al final. Mencioname tres discos. Ya sea de Kiss o la música en general.
-Obviamente tiene que haber uno de Kiss, Destroyer, del año 76. Otro disco importante en mi vida es uno de 1987 de Whitesnake; y Led Zeppelin III. Son tres discos muy importantes.
-Y para cerrar, ¿alguna anécdota “kissera” que tengas guardada?
-Tengo una anécdota con Gene Simmons más que con Kiss. Fue cuando estuvo el Rock´n Roll All Stars en el año 2012. Sacamos Meet & greet para estar con la banda, donde me firmaron un bajo todo eso. En un momento estaban filmando “Family Jewels” que era un Reality, entonces se corta el set para eso y justo tenía que entrar yo para sacarme una foto. Me dicen que espere, que tenían que filmar y no se qué. Me vuelvo a la fila y cuando aparece Gene Simmons, imagínate, yo con un 1.65 y el con 2 metros, me dijeron que entre y Simmons empezó a gritaerme “JAVIER ! JAVIER! VEN CONMIGO JAVIER!” en un español bastante difícil y bueno, me abraza y nos sacamos fotos. En esa época no había tanta calidad, asique yo había llevado, en ese entonces, las ultimas maquinas digitales. Tuvo el agrado de esperar y hacer posible que yo y tres amigos que había invitado, quedáramos retratados esa noche. Una cosa linda que diga mencione tu nombre un héroe tuyo.
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